“TALLER DE LAS ACTIVIDADES DE LA VIDA DIARIA”.
Este taller se llevará a cabo durante el año 2013 y
se realizara en forma semanal, los días martes de 14 a 16 y de 1630 a
1830 hs. Esta dirigido a personas que necesiten reforzar o aprender
a manejar situaciones de la vida diaria. Las actividades que se desarrollan giraran
en torno a las siguiente áreas: motriz, sensopercepción, socialización, juego, etc.
La comunicación con los padres se realizará en forma
constante a través de entrevistas y de la utilización de un “cuaderno de anotaciones personal” del
cual deberá hacerse responsable cada niño que asista al taller. En el, es en
donde se le indicará a los padres las actividades a reforzar en el hogar según
el nivel alcanzado por su niño, y en caso que lo requieran, podrán evacuar
dudas y comunicar sus experiencias a través del mismo.
Por medio del presente proyecto de taller se
pretende lograr la implementación de distintos espacios en los cuales se pueda
trabajar el autovalimiento en las actividades de la vida cotidiana. Para esto,
se tomará como punto de partida el conocimiento sobre las realidades
particulares de los participantes del taller, sus capacidades, características
y necesidades; para realizar una programación de actividades practicas y de
apoyo que permitan avanzar cada vez más en el desarrollo de la autonomía
personal y en el desenvolvimiento social.
El desarrollo de las habilidades de la vida diaria hace
referencia a la capacidad de atender y resolver de una manera más o menos
eficaz las propias necesidades que se
presentan a diario en forma cotidiana.
Los contenidos del taller estarán relacionados al
cuidado de sí mismo y de la salud, el cuidado del hogar, el acceso y las
interacciones con la comunidad con relación a las necesidades diarias y las
relaciones interpersonales. Así como también se intentara crear nociones
básicas de manejo del dinero, el tiempo (aprendizaje de la hora en reloj de
agujas), las cantidades físicas de los productos, etc.
Para ello nos centraremos y haremos hincapié en dos
áreas de formación:
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A) Las
habilidades de Cuidado Personal, dentro de las cuales encontramos:
- Alimentación
- Vestido
- Cuidado personal (baño, aseo)
B) El manejo
del hogar, la cual incluye:
- Tareas específicas en las diferentes dependencias del
hogar (dormitorio, baño, living/comedor, cocina, etc.)
- Cocina (preparación de comidas, normas de
seguridad)
- Salidas a la comunidad (compras, manejo del
dinero, uso de transporte).
Las estrategias necesarias para llevar a cabo este
taller son algunas de las que a continuación se detallan:
·
El ambiente
será, en la medida de lo posible, estructurado y predecible para evitar sobre-estimulación, ansiedad y conductas inadecuadas.
·
El niño tendrá
su espacio y este será respetado por los demás integrantes del grupo.
·
Se captará la
mirada del niño, antes de dar la consigna. Se tomara un espacio de tiempo
apropiado para que cada uno comente, si así lo desea, lo que ha podido realizar
durante la semana en su hogar.
·
Las consignas se
darán en lenguaje claro y concreto para cada objetivo y tarea.
·
Se respetará el
tiempo de ejecución de acuerdo a las habilidades propias de cada niño. No se lo
exigirá bajo ninguna circunstancia.
·
Las actividades
serán sencillas y de fácil control y siempre serán supervisadas.
·
Las actividades
serán de corta duración, variadas y compartidas para favorecer el aprendizaje
de habilidades, minimizando las actividades aisladas y solitarias. Se intentara
incluir a todos por igual en la realización de las actividades, aprovechando al
máximo los potenciales individuales a favor del grupo.
·
Se gratificará
al niño ante el intento, aunque sea fallido (¡Muy bien!, abrazo, cosquilla,
beso…)
·
Se graduará el
tipo de apoyo que el niño debe recibir (apoyo masivo, disminución progresivo
del apoyo, indicación, supervisión, etc.) para el logro de la adquisición del
hábito.
·
Se permitirá que
el niño experimente con los objetos pero se lo supervisará para que pueda
reconocer el mal uso de los mismos.
La importancia de aprender las A.V.D se fundamenta
en adquisición de la habilidad para realizarlas tan independientemente como sea
posible y de este modo también favorecer el fortalecimiento de la autoestima y
los sentimientos de autovalimiento que son centrales para el desarrollo del ser
humano como tal.
La capacidad de poder atender a las propias
necesidades es esencial. La mayoría de los niños adquiere estas destrezas de
autonomía en forma natural y automática,
por generalización e imitación de los adultos y sus pares. Sin embargo, en
nuestro caso, estos hábitos resultan más difíciles de incorporar, requieren
mayor entrenamiento y práctica, así como de una rutina adecuada de aprendizaje.
No obstante, debemos tener en claro que cuanto más el niño sepa cuidarse de sí
mismo, menos ayuda va a necesitar como adulto.
Al enseñar las actividades de la vida diaria, la
meta a lograr es poder alcanzar el mayor grado de independencia que sea posible,
contando para ello con los apoyos adecuados en forma y momento, brindándoles así
la oportunidad de mejorar individual y socialmente.
VALERIA VIEJO, AT